Moreno se enfrenta a Lanús, el primer equipo que lo sufrió en el país. En el arco de Colón y Alsina festejó sus cuatro goles en Avellaneda, donde no moja desde el 17 de octubre pasado. ¿Recuperará la memoria después de un año y monedas?
Todavía había más ruido que nueces cuando Giovanni Moreno, figura estelar del fútbol colombiano, comenzó a mostrarse ante un nuevo público, a sacarse las ganas en el fútbol argentino, a demostrar sus flamantes y honerosos pergaminos. Era la noche del 17 de septiembre de 2010, mucho antes de la mentadísima lesión en Floresta, claro.
Su Racing le ganaba en el Cilindro a Lanús por 1 a 0 y la Academia tenía un penal a favor. Se paró entonces, a los 18 minutos del segundo tiempo, frente a Agustín Marchesín y cambió ejecución por gol para el 2-0 parcial y camino al 4-0 final. El arco de la antigua visitante, ese que le da la espalda a la esquina de Colón y Alsina, sacudió sus redes por primera vez. Pero no sería la última. Es más, el cafetero tiene exclusividad con ese arco, ni más ni menos…
Después llegaría un gol a Huracán y dos a Argentinos Juniors. Contra el Bicho fue la última vez que gritó en Avellaneda, un 17 de octubre de 2010. Y siempre sobre la misma meta de Colón y Alsina… Contra River, por ese Apertura, también mojó pero en condición de visitante. Y su único grito post operación fue contra Unión, pero en Santa Fe.
Este miércoles, cosas del fútbol, Gio Moreno volverá a jugar contra Lanús. ¿Se quedará con el monopolio de ese arco o abrirá una sucursal en el otro, de cara a su hinchada?
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